Tratamiento de aguas servidas
Te invitamos a conocer cómo funciona el proceso de recolección y tratamiento de aguas servidas en la Región de Valparaíso para los más de 650 mil hogares que cuentan con nuestro servicio.
¿Cómo recogemos el agua utilizada?
Cuando el agua potable ya ha sido ocupada para fines domésticos, industriales u otro tipo de actividades, se transforma en aguas servidas, o también llamadas aguas negras o aguas residuales.
Las redes interiores de cada hogar descargan las aguas servidas en la última cámara de la propiedad, llamada unión domiciliaria, la que se empalma a una red de conducciones compuesta por colectores y elementos como cámaras de inspección, plantas elevadoras, entre otros.
A través de esta red se transportan las aguas servidas hasta nuestras plantas de tratamiento de aguas servidas (PTAS). Este sistema funciona por gravedad, escurriendo desde los puntos más altos a los más bajos.
Si por las condiciones geográficas esto no es posible, se emplean plantas elevadoras que permiten llevar las aguas servidas a un punto más alto para que continúen su escurrimiento gravitacional.
Cuando la red se ve obligada a transportar una mayor cantidad de aguas servidas, el tamaño de los colectores aumenta. Un ejemplo de esto, son los macrocolectores o aquellos ramales principales que descargan el agua ya utilizada en las PTAS.
Actualmente recolectamos aguas servidas a través de más de 3596 kilómetros de red de alcantarillado, las que son tratadas en nuestras plantas para luego devolverlas saneadas a ríos y esteros en condiciones adecuadas para ser utilizadas como riego
¿Qué hacemos con el agua utilizada?
Una vez que las aguas servidas llegan a las PTAS, nuestros equipos ejecutan el proceso de descontaminación hasta alcanzar el nivel exigido por la normativa chilena DS90 para, posteriormente, reintegrarla al medio ambiente.
Para conseguir su saneamiento, las aguas servidas son sometidas a los siguientes procesos:
Pretratamiento:
Un sistema mecanizado retira la arena y basura del agua para después enviarlas a sitios de disposición final.
Tratamiento secundario:
Se retira la materia orgánica presente en las aguas por medio de la degradación por bacterias. Luego de este proceso, el residuo o lodo es separado del agua por decantación.
Desinfección:
El agua obtenida de los procesos anteriores es, finalmente, desinfectada con gas cloro y descargada en fuentes superficiales como ríos y esteros.
En la etapa de tratamiento, los lodos obtenidos son deshidratados y trasladados a rellenos sanitarios, mono rellenos y a predios forestales y/o agrícolas para disposición benéfica.
En algunas localidades, las aguas servidas son pretratadas y evacuadas a través de emisarios submarinos mar adentro, sin ocasionar daños al medio ambiente ni a las personas.
Para asegurarnos de la calidad y la correcta operación en cada una de las etapas que involucran la gestión integral del agua, nuestros equipos realizan un importante trabajo de mantenimiento. Éste asegura que todos los instrumentos, equipos electromecánicos, y redes involucradas en estos procesos se encuentren siempre a máxima disponibilidad y confiabilidad en su funcionamiento, permitiéndonos entregar un servicio de excelencia a nuestra comunidad.
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